Son ahora mantas gordas las que me arropan por las noches y aún con todo el dinero del mundo, me faltaría algo.
Perdóname por mis caras, mis ojeras, mi habitual maldespertar, mis arrugas, mis lunares... los días en que no te gustó mi pelo o simplemente no llevar algo abitual. Perdóname por no saber perdonar, por guardarme el rencor bajo la piel, por creerme a veces algo que no soy y desesperarme reiteradas veces, por ilusionarme con tonterías y pensar que puedo hacerlo todo yo sola. Perdóname por lo inconsciente que soy en determinadas ocasiones, por no saber comportarme como tal, por si te he hecho sufrir alguna vez con mi mal hablar o por tropezar doble vez con una piedra después de tu sabio aviso. Perdóname por mirarte a los ojos fíjamente, por quedarme encantada con tus rizos, por que me ipnotice tu aroma, por admirar tu buena organización y por no entender cómo logras conseguir tu exelente caligrafía...
No sé si llamarlo confesión, pero tuve el presentimiento de tenerte a mi lado durante todo esto. El perdón es uno de los mandamientos, pero siento que mi vida está llena de pecados. Quiero que me despoges de mi último mal hacer, porque lo hago loca e irrevocablemente.

... perdóname por quererte, tanto.
me hiciste llorar...
ResponderEliminarme pasa parecido a lo ke escribiste
o hasta igual
creo ke hoy no podia caer tan abajo, esto termino por sepultarme en el fondo de mi puto abismo, ke aun, despues de tanto tiempo, no consigo salir... CARAJO! como salen lagrimas
pero yo me pregunto
debian salir todas hoy?
ke sigas bien, excelente texto...