martes, 23 de octubre de 2012

I go running with the heart on fire.

No es por alarmarse, pero sí. "Que cunda el pánico" es lo que no se suele decir. ¿Por qué? Siempre intentamos tranquilizarnos, apaciguarnos, pero ¿Por qué?
Conozco la tranquilidad y conozco los nervios, y puedo decir que muchas veces las cosas con impulso salen mejor. Intentamos retraer lo que nos mueve por dentro, cuando en realidad lo que tenemos que hacer es utilizarlo a nuestro favor. Muchos lo llaman miedo, otros pasión. Podría ser un poco de los dos. Pero justo en ese punto de estallido, es cuando podemos convertirnos en personas realmente valientes.
No te guardes esa carcajada, no esperes al beso que deseas dar, no te quedes sentada haciéndote preguntas. Llama cuando quieras hablar, visita lugares cuando quieras conocer, prueba aquello que sabes que está mal, pero hazlo. Quítate la espina.
Decir que no me reconozco es poco. No sé hacia dónde voy ni si todo esto es cierto. Sólo sé que ya lo estoy haciendo. De momento no va nada mal.

domingo, 14 de octubre de 2012

Diying young, I'm playing hard.

Después de pisar el asfalto con la espalda y jugar a cartas que me llevaron a ganar recordé que me había prometido no volver a morir. Por lo que fuera. Menuda puta vida que llevamos que a ratos nos encanta. No me hacía falta entrar la primera, pero la noche abrió los ojos y en el fondo gritaba por encender la llama. Metí la pata. Vivimos en el siglo XXI aparentando ser personajes de época. Tanto rap del malo con mensaje subliminal que perdiste el norte y el encanto. Ese poco encanto que me encanta. Necios y sin centro de gravedad.
Nos agarramos a toda botella de cristal para jugar a ser humanos. Nos disfrazamos tú de mi y yo de ti. Nos mordimos los huesos y arrancamos la piel con tal de no hablarnos nunca más. Establezcamos normas. Yo ya he puesto punto y final.


Now, I've got the war in my mind